Voy rompiendo las persianas para dejar por mi ventana el camino abierto.
Quédate a mi lado para comernos al amanecer lo que quieran las manos.
Y de postre un sol maldito que termine de volverme loco, que ya sabes que la luna a mí siempre me sabe a poco.
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¿Donde te habias metido?
ResponderEliminarsiempre es grato encontrar lugares asi de bonitos, un placer :)